Una de las partes fundamentales de la raqueta para todo jugador de tenis es el encordado. Pese a que con frecuencia la importancia del cordaje es subestimada son muchos los jugadores que emplean tiempo y dinero buscando la raqueta perfecta para luego encordarlas con cualquier cordaje. Pero seguro que lo que te estás preguntando es: ¿Cuándo debo cambiar el cordaje de la raqueta de tenis? Te solucionamos esta duda y otras más que te pueda surgir.
Es importante tener claro que tanto el tipo de cordaje como el encordado influirán de forma directa en las características de juego.
Tres aspectos importantes del encordado
- Longitud: variará según el tipo de marca y raqueta. La media estándar son 11 metros pero algunas raquetas necesitan hasta 12 metros.
- Tensión: dependerá del tipo de jugador y su forma de juego. Una tensión alta favorecerá un mayor control disminuyendo la potencia. En cambio, una tensión baja aumentará la potencia.
- Diámetro: A mayor grosor mayor duración pero menor toque. Si al contrario el diámetro es más fino, mayor será la potencia pero mucho menor la resistencia.
Cinco tipos de cordaje de tenis
Existe una amplia oferta de tipos de cordajes. Muchos son los fabricantes de estos cada uno con su propia marca. A groso modo podemos clasificarlos en 5 categorías:
- Cordajes de Tripa Natural: compuestos por tripa natural, con protección y sin armazón. Se caracterizan por su gran elasticidad y resistencia. Su tensión se mantiene estable. Considerado un cordaje adecuado para prevenir lesiones ya que absorben muy bien las vibraciones. Como desventaja, suelen durar poco siendo sensibles al clima y con un precio elevado.
- Cordajes de Nylon: considerado el cordaje de tenis por excelencia. Fabricados con un centro de nylón con múltiples capas de filamentos. Es importante recalcar que cuantas más capas tenga de filamentos mejor será la calidad de este. Existen varias categorías dentro de este tipo de cordaje, entre los más destacados están los cordajes de monofilamentos con multi-capas o multifilamentos con un centro sólido.
- Cordajes de poliéster: fabricados con un único centro de poliéster, disponibles en varios calibres. Se caracterizan por su larga durabilidad. Como desventaja, proporcionan una menor potencia perdiendo la flexibilidad más rápido. Este tipo de cordaje es recomendable para jugadores que suelen romper cuerdas con mucha frecuencia.
- Cordajes de Kevlar: considerado el cordaje más duradero del mercado. Caracterizado por su rigidez generando poco nivel de potencia. Este tipo de cordaje puede provocar lesiones en su brazo y muñeca.
- Cordajes híbridos: consiste en la mezcla de cordajes. Las cuerdas principales (verticales) y las cuerdas cruzadas (horizontales). Su principal ventaja es la durabilidad y la variedad de combinación de cordajes.
¿Cuándo necesitamos cambiar el cordaje?
Existe una regla de oro para cuando cambiar el cordaje. Concretamente hay que cambiarlo tantas veces al año como veces jugamos por semana siempre teniendo en cuenta que no es lo mismo jugar una hora que tres de media. Muchos son los jugadores que piensan que se deben cambiar las cuerdas cuando se rompen pero sin duda el mejor indicativo para saber cuándo debemos reemplazar el cordaje es la tensión del cordaje.
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